Las patatas bravas son la clave

Cuando busco un restaurante para comer, lo primero en lo que me fijo de la carta son las bravas. Es un plato universal, todos los bares tienen, todo el mundo sabe hacerlas. Pero si las pides y están malas, olvídate de pedir nada más platos. 

Lo mismo pasa en los negocios online.

Si descuidas el correo de bienvenida, la persona que contesta al teléfono o la forma de servir el pedido. Esas cosas que son “fáciles” de hacer y por lo tanto puede hacer “cualquiera”. Lo único que consigues, es quitarle las ganas de “pedir más platos” a quien recibe todos esos impactos.

Todas nuestras acciones ayudan a dejar huella en quien las recibe. Las grandes y las pequeñas. Y todas tienen la misma importancia a la hora de tomar una decisión. 

Todas los impactos cuentan. 

No es lo que decimos que somos, es lo que hacemos. 

Hasta luego.

Borja.